El Pipi está mareado. Ojo, de dar vueltas olímpicas: el Clausura, el Mundial Juvenil y ahora va por la Mercosur. A pesar del mal arranque del equipo, tiene una fe de locos.
ASUNCION (ENVIADO ESPECIAL). Su mirada apunta hacia una ventana del imponente Yacht y Golf Club. En el hotel donde San Lorenzo espera esta noche el partido con Olimpia, Leandro Romagnoli se recuesta en uno de los sillones. "Tenemos que ganar. Si queremos seguir con las ilusiones de aspirar a la Mercosur, tenemos que ganar", repite el Pipi. La derrota como local 2 a 1 ante Flamengo es un golpe que el juvenil no asimila rápido. "Son puntos clave en una definición como ésta. En casa hay que sumar de a tres. Por eso, ahora vamos a recuperar el terreno perdido". Hay ansiedad en el diez del equipo de Manuel Pellegrini. Y ánimo de revancha inmediata en Asunción.
-¿Se hace más complicado jugar con esta obligación?
-No, no sé si es una presión o qué. Lo que sabemos es que debemos ganar, o en lo posible sumar. Perder en el Nuevo Gasómetro nunca está en los planes, pero ya nos mentalizamos de que hay que dar el primer paso acá. Que se puede. Que el equipo va a aparecer otra vez.
-¿Una derrota es resignar toda chance en esta Copa?
-Y... Si bien todavía quedan cuatro partidos, se hará duro. Sin dudas, muy duro. Sobre todo porque se clasifica sólo uno. Des pués tenés que pelear, hacer la cuenta para ver si entrás como mejor segundo. No queremos que nos pase como en las dos anteriores (Mercosur 00 y Libertadores 01), que nos quedamos afuera de la segunda ronda.
-La última vez que San Lorenzo ganó en el exterior fue un 2 a 1 a Corinthians, en la Mercosur 99. ¿Por qué les cuesta?
-Y... Se nos complica. Pero no hay un motivo. Este plantel demostró, en eso de ganar de visitante, que en el Clausura pudo -sumó ocho triunfos consecuti vos-. Claro, no fue fuera del país.
La presencia de San Lorenzo en el hotel llama la atención de algún curioso. "¿Ves, ése es el Pipi, ah?", comenta uno de lejos. Claro, la imagen del juvenil se conoce bastante después de los últimos dos meses. San Lorenzo ganó el Clausura con él como una de las figuras, y más tarde fue Campeón del Mundo con el Sub 20. Las credenciales le sobran. Pero los elogios no lo empalagan. Romagnoli le agarró el gustito a eso de los festejos seguido. Y su intención es que las burbujas no paren. "Quiero ganar una Copa, quiero seguir ganando todo. Es un título internacional que el club no tiene. Sería bárbaro", cuenta. Con apenas 20 años, el nene repasa la historia. Y la quiere cambiar antes de irse a Europa.
-¿Ya pasó el tiempo de una transferencia?
-No pienso en eso. Me quiero quedar un añito más en San Lorenzo. Ese es mi deseo, todavía soy joven y estoy cómodo con mis compañeros, con Manuel...
-¿Te puede perjudicar no haber hecho la pretemporada?
-No lo siento así. Eso habría sido lo ideal, pero estoy bastante bien. Quizá me falte un poco, pero ya estoy entrando en ritmo.
-Se dice que lo más difícil en el campeón es mantenerse. ¿Con qué se va a encontrar el hincha en este semestre?
-Esto recién empieza. No se puede hacer un balance. El torneo todavía no comenzó y apenas se jugó un partido en la Mercosur. Sin dudas que nos perjudica que se hayan ido jugadores como Coloccini o Tuzzio, pero también llegaron refuerzos como Diego Capria y Daniel Fagiani. Además, sigue la mayoría del plantel. Por la campaña que se hizo es complicado repetir, sí. Pero este grupo puede hacer algo lindo. Ya lo demostró, ¿no?
-¿Se hace más complicado jugar con esta obligación?
-No, no sé si es una presión o qué. Lo que sabemos es que debemos ganar, o en lo posible sumar. Perder en el Nuevo Gasómetro nunca está en los planes, pero ya nos mentalizamos de que hay que dar el primer paso acá. Que se puede. Que el equipo va a aparecer otra vez.
-¿Una derrota es resignar toda chance en esta Copa?
-Y... Si bien todavía quedan cuatro partidos, se hará duro. Sin dudas, muy duro. Sobre todo porque se clasifica sólo uno. Des pués tenés que pelear, hacer la cuenta para ver si entrás como mejor segundo. No queremos que nos pase como en las dos anteriores (Mercosur 00 y Libertadores 01), que nos quedamos afuera de la segunda ronda.
-La última vez que San Lorenzo ganó en el exterior fue un 2 a 1 a Corinthians, en la Mercosur 99. ¿Por qué les cuesta?
-Y... Se nos complica. Pero no hay un motivo. Este plantel demostró, en eso de ganar de visitante, que en el Clausura pudo -sumó ocho triunfos consecuti vos-. Claro, no fue fuera del país.
La presencia de San Lorenzo en el hotel llama la atención de algún curioso. "¿Ves, ése es el Pipi, ah?", comenta uno de lejos. Claro, la imagen del juvenil se conoce bastante después de los últimos dos meses. San Lorenzo ganó el Clausura con él como una de las figuras, y más tarde fue Campeón del Mundo con el Sub 20. Las credenciales le sobran. Pero los elogios no lo empalagan. Romagnoli le agarró el gustito a eso de los festejos seguido. Y su intención es que las burbujas no paren. "Quiero ganar una Copa, quiero seguir ganando todo. Es un título internacional que el club no tiene. Sería bárbaro", cuenta. Con apenas 20 años, el nene repasa la historia. Y la quiere cambiar antes de irse a Europa.
-¿Ya pasó el tiempo de una transferencia?
-No pienso en eso. Me quiero quedar un añito más en San Lorenzo. Ese es mi deseo, todavía soy joven y estoy cómodo con mis compañeros, con Manuel...
-¿Te puede perjudicar no haber hecho la pretemporada?
-No lo siento así. Eso habría sido lo ideal, pero estoy bastante bien. Quizá me falte un poco, pero ya estoy entrando en ritmo.
-Se dice que lo más difícil en el campeón es mantenerse. ¿Con qué se va a encontrar el hincha en este semestre?
-Esto recién empieza. No se puede hacer un balance. El torneo todavía no comenzó y apenas se jugó un partido en la Mercosur. Sin dudas que nos perjudica que se hayan ido jugadores como Coloccini o Tuzzio, pero también llegaron refuerzos como Diego Capria y Daniel Fagiani. Además, sigue la mayoría del plantel. Por la campaña que se hizo es complicado repetir, sí. Pero este grupo puede hacer algo lindo. Ya lo demostró, ¿no?
Martes 31 de julio de 2001
Fuente: Ole
Marianela Colipe
